LAB manifiesta su preocupación por lo ocurrido ayer, 5 de mayo, en la Escuela de Ingeniería de Gipuzkoa. Un grupo de estudiantes se queja de la dureza en la evaluación de una asignatura. Desde el Consejo de Estudiantes se interpuso formalmente la correspondiente queja, pero aún no está cerrado el proceso de resolución de la misma. En este contexto, ayer un nutrido grupo de estudiantes entró en la escuela y en la oficina de un profesor mientras fuera se proferían gritos. Otros profesores tuvieron que encerrarse en sus despachos ante la situación de tensión. Consideramos que el comportamiento del alumnado contra estos trabajadores es totalmente inaceptable.
El alumnado tiene todo el derecho a presentar quejas y a tener todas las garantías en el proceso de resolución de las mismas. Y, por supuesto, también para expresar su protesta. Pero de ahí a la situación vivida ayer hay mucha distancia. La actuación de todos y todas, profesorado y alumnado, puede ser criticada de forma argumentada y constructiva, y todas y todos tenemos derecho a responder a las críticas de la misma manera, pero no es de recibo que el profesorado sufra esta presión al realizar su trabajo.
LAB ofrece su apoyo al personal de la UPV/EHU que ha sufrido esta situación y pedimos que se busque una solución lo antes posible entre el alumnado y la dirección del centro para terminar el conflicto. No podemos tolerar enfrentamientos entre alumnado y profesorado dentro de la universidad, ni el acoso y/o amenazas contra las y los trabajadores.