Hay que aprovechar la oportunidad para dar pasos hacia el marco propio de relaciones laborales y protección social

En la comparecencia realizada hoy, la coordinadora general Garbiñe Aranburu ha señalado que, además de incrementar las luchas en negociación colectiva, LAB apostará por cambios políticos que garanticen condiciones laborales y de vida dignas.

La pérdida de poder adquisitivo, el aumento de los precios de los alimentos, el encarecimiento de las hipotecas, el debilitamiento de los servicios públicos, la crisis de cuidados o la vulneración del derecho a la salud laboral se han convertido en el día a día de las y los trabajadores en los últimos meses.

Todo esto, mientras aumentan los beneficios de las grandes empresas y de los bancos y no hay políticas de redistribución de la riqueza. La garantía de poner límites a este proceso de precarización y empobrecimiento de la vida está siendo la capacidad de movilización de las y los trabajadores.

Este curso, nuestro principal cometido será poner sobre la mesa medidas concretas para mejorar las condiciones de vida de las y los trabajadores y fomentar dinámicas a favor de las mismas.

Creemos que hay condiciones adecuadas para ello:

  • Se está dando un empoderamiento colectivo de las personas trabajadoras, especialmente destacado en los sectores feminizados. Los dos últimos cursos han demostrado la determinación de las y los trabajadores en sectores y empresas para luchar por un reparto más equilibrado de la riqueza y unas condiciones laborales dignas. Este curso este impulso tendrá continuidad.
  • La Huelga General Feminista General que hemos convocado junto al Movimiento Feminista. Una huelga por el derecho a un cuidado digno, a distribuir y reorganizar las tareas de cuidado y a que las y los trabajadores del ámbito de los cuidados puedan realizar su trabajo con dignidad. Una huelga para exigir la creación del Sistema Público Comunitario de Cuidados.
  • Nuestra determinación para impulsar cambios políticos a través de la lucha en los centros de trabajo y en la calle, y las posibilidades que ofrece el contexto político para ello:
  • Por un lado, si se forma un nuevo Gobierno en el Estado, el independentismo será determinante. Creemos que hay que aprovechar esta fuerza para dar pasos en la construcción del Marco Vasco de Relaciones Laborales y Protección Social, poner límites a la estatalización de la Negociación Colectiva y blindarla en nuestro ámbito. En definitiva, que se respete el derecho de las y los trabajadores vascos a decidir aquí las condiciones de laborales y de vida sin injerencias estatales.
  • Criticamos que en Nafarroa se haya constituido un Gobierno de continuidad, con poca ambición para mejorar los servicios públicos y las condiciones de vida de las y los trabajadores.
  • Por otro lado, en la CAV tendremos elecciones a Lehendakaritza. Las elecciones de mayo han dejado claro que, aunque a las y los trabajadores no se nos dé voz en el diseño de las políticas públicas, no solo tenemos voz, sino también voto. Que tenemos capacidad para castigar a quienes hacen políticas a favor de la patronal y reforzar a quien sitúa las reivindicaciones de los y las trabajadoras en la agenda política.

Así, este curso tenemos dos retos principales:

  1. Activar luchas en centros de trabajo y sectores
  • Seguiremos llevando a la práctica un nuevo sindicalismo que llegue a todas las trabajadoras y trabajadores. Un sindicalismo feminista que mantenga los avances realizados en los últimos años y dando nuevos pasos en el sindicalismo antirracista.
  • La división sindical es un obstáculo para conseguir las mejores correlaciones de fuerzas posibles frente a la patronal. Vamos a esforzarnos en hacer frente a la división sindical. Formando intersindicales lo más amplias posibles entre quienes coincidimos en unos objetivos mínimos. También daremos un alcance social a estos conflictos, creando alianzas con otros agentes sociales, feministas, pensionistas o jóvenes.
  • Principales contenidos por los que lucharemos:
    • Dignificar los salarios para la distribución de la riqueza: garantizando el poder adquisitivo, combatiendo la brecha salarial y estableciendo un salario mínimo de 1.400 euros.
    • Defensa y desarrollo de los servicios públicos: sanidad y educación.
    • Darle centralidad al tema del cuidado. En defensa del Sistema Público Comunitario de Cuidados, pero también centrándonos en las medidas de corresponsabilidad que deben conllevar una mayor implicación de los hombres en la reorganización de las tareas de cuidado y una distribución más adecuada de las mismas.
    • Respetar el derecho a la salud laboral y prestar atención a las medidas de prevención.
    • Reducción de jornada. Tenemos como objetivo una semana laboral de 30 horas, porque es una medida para el reparto de todos los trabajos, para abordar la transición ecosocialista o para afrontar los retos de la digitalización.
    • También será importante para nosotras dar pasos en la euskaldunización del mundo laboral, más aún viendo los ataques que está sufriendo el euskera.

2. Agenda social compartida entre agentes del ámbito de la izquierda independentista.

  • Además de los contenidos que podemos conseguir por la vía de la acción sindical y la negociación colectiva, como sindicato de clase independentista, LAB lucha por la transformación social. Queremos provocar cambios en las políticas públicas, construir un marco vasco, tener la capacidad de decidir las condiciones de trabajo y de vida de los y las trabajadoras.
  • Por ello, apostamos por abordar ámbitos de colaboración entre los agentes sindicales, sociales y políticos que defendemos la transformación social y la soberanía.
    • Cerrar la puerta a los recortes en el Estado y avanzar en los derechos sociales y en los que tenemos como pueblo, en la territorialidad, en la capacidad de decisión.
    • Políticas públicas redistributivas dentro de las competencias de los Gobiernos de aquí para el impulso de políticas a favor de las y los trabajadores. Realizamos una aportación para hacer posibles en Euskal Herria las transformaciones que no son posibles en los estados y contribuir a estructurar el marco vasco, incidiendo en la necesidad de profundizar en la soberanía.
  • Consideramos importante contar con una agenda social compartida. Qué queremos decir con esto, que hay varios temas que podemos tratar en común:
    • Pensiones dignas y pensión mínima de 1.080 euros.
    • Impulsar reformas tributarias en el desarrollo de los servicios públicos o en el ámbito de los cuidados.
    • 1.400 euros de salario mínimo. Recordamos aquí que tras una propuesta de EH Bildu al Parlamento Vasco, este instó al Gobierno a mantener una posición proactiva a favor del salario mínimo de 1.400 euros. Corresponde al Gobierno interpelar a la patronal y este será uno de los temas que abordaremos mañana con Idoia Mendia.