La falta de financiación afecta gravemente a la UPV/EHU

Recientemente nos hemos enterado de que, debido a la falta de financiación, la Dirección ha suspendido muchos puestos nuevos que estaban en vías de creación. En concreto, según los datos aportados en el mensaje enviado por el Vicerrector de PDI, no se crearán, de momento, las 38 plazas de Profesorado Ayudante Doctor ni las 19 plazas de Profesorado Asociado. Así mismo, se han retenido las 56 plazas de pleno/cátedra que estaban aprobadas para la promoción de 2024 y las que iban a aprobarse para la promoción de 2025.
Esta situación es muy grave y acentúa los problemas generados por la infrafinanciación que padecemos en la UPV/EHU desde hace años.

En cualquier caso, es imprescindible tener clara la causa del problema. Así, se debe saber que la UPV/EHU tiene un déficit (de 20 millones de euros) debido a que en los años anteriores se ha necesitado más dinero que el presupuestado. En los últimos años, estas deudas se han afrontado a través de aportaciones extraordinarias del Gobierno Vasco. Pero, por lo que parece, esta vez el Gobierno Vasco no va a asumir ese sobrecoste. El Vicerrector dice que ese déficit se ha heredado y que gestionar esta situación no es nada fácil ni del gusto de nadie. Esta información es significativa, aunque no haya sido comunicada públicamente por el equipo rectoral.

Pero la clave es la infrafinanciación de la universidad pública, hecho que reivindicamos en voz alta una y otra vez. Mientras tanto, el Gobierno Vasco pone la alfombra roja a algunas iniciativas de universitarias privadas y no destina la financiación necesaria hacia la UPV/EHU para poder abastecer bien la plantilla, mejorar la ratio PDI/PAS, pagar los salarios adecuados, hacer las inversiones que necesitan los departamentos y servicios y mantener las infraestructuras obsoletas. Ya hemos mencionado en numerosas ocasiones que la LOSU recoge que para 2030 hay que destinar el 1% del PIB a las universidades públicas (eso es, ¡a las públicas! no a las universidades públicas y privadas, como nos quiere hacer creer la dirección del departamento de Ciencia, Universidades e Innovación). Actualmente estamos en el 0,42% del PIB y, que sepamos, no hay movimientos para crear un plan para alcanzar el gasto público al que se refiere la LOSU. Es más, las intenciones del consejero parecen estar en la dirección contraria.

Esta nueva situación supone un paso más en el camino hacia el estrangulamiento de la universidad pública. El personal afectado es numeroso. Tenemos motivos para enfadarnos. Dentro de la UPV/EHU hay muchos aspectos que mejorar, incluida la gestión, pero tenemos que tener claro el origen de la situación que estamos viviendo: la infrafinanciación endémica de la UPV/EHU, y el uso que hace el Gobierno Vasco de la financiación para condicionar el funcionamiento de la UPV/EHU.

Ante esta situación es imprescindible que todo el personal de la UPV/EHU, tanto trabajadores y trabajadoras como estudiantes, así como el equipo rectoral, mostremos una actitud de firmeza ante el Gobierno Vasco.